A sabiendas de que el progreso de un país depende, en gran medida, de la formación que reciben sus ciudadanos, el Instituto de Derechos Humanos y Desarrollo de la USMP organizó el foro La innovación y el acceso a una educación de calidad.
La agenda nacional demanda -con urgencia- una mejora educativa que asegure el bienestar de la sociedad peruana en las próximas décadas. Un escenario retador, es cierto, pero que también invita al optimismo. Siguiendo esta línea, el Instituto de Derechos Humanos y Desarrollo de la USMP organizó La innovación y el acceso a una educación de calidad, un concurrido foro en el cual participaron expertos en el ámbito educativo.
Nuevas respuestas
Entre ellos estuvo el magíster Óscar Becerra, jefe de la Oficina de Admisión de nuestra casa de estudios, quien subrayó la necesidad de brindar a los alumnos conocimientos que sean de utilidad para su ejercicio profesional. “Debemos ofrecerles herramientas que sirvan”, remarcó el expositor. Por su lado, la congresista Paloma Noceda compartió con los asistentes un dato preocupante sobre la situación de los escolares en el Perú: en la actualidad más de 1 millón 300 mil niños y adolescentes no asisten al colegio.
Para afrontar esta problemática, el ingeniero Juan Manuel Ostoja, CEO de la Corporación Educativa de la Universidad San Ignacio de Loyola, planteó identificar y favorecer las habilidades de los jóvenes, procurando que la escasez de recursos económicos no siga siendo una limitación.
Una moción que complementó la Ph.D. Roxana Bravo Manrique, especialista en innovación del Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan), al afirmar que las reformas metodológicas en la enseñanza deben ir de la mano con nuevas políticas de salud y alimentación. Para que el crecimiento, de una vez por todas, sea sinónimo de desarrollo sostenido.